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21/09/2010 - cope.es

La Guardia Civil recupera veintiséis toneladas de cobre sustraídas.

En la operación han sido detenidas cuatro personas por hurto y por simulación de delito. El cobre fue sustraído de un camión que lo transportaba desde Sevilla a Barcelona.

La Guardia Civil ha recuperado en un almacén de Granada las veintiséis toneladas de cobre, valoradas aproximadamente en 150.000 euros, que fueron sustraídas el pasado día 5 de septiembre con la connivencia del camionero que las transportaba.

En esta operación la Guardia Civil ha detenido a cuatro personas: en Puzol (Valencia) fue detenido un camionero de Pinos Puente (Granada) por simulación de delito por denunciar el falso robo de las planchas de cobre; y en Granada han sido detenidas otras tres personas por el hurto del cobre y por la simulación del delito.

La historia comienza cuando el camionero tiene noticias por su empresa de que va a transportar un cargamento de cobre desde Sevilla hasta Barcelona, y decide vender el cargamento por su cuenta. Para ello se pone en contacto con un conocido en Granada, uno de los detenidos, y le ofrece el cobre. Éste último, a su vez, se pone en contacto con los otros dos detenidos, y entre todos idean simular un robo, apoderarse del cobre, ocultarlo en el almacén de uno de los detenidos y más tarde venderlo, presumiblemente en las chatarrerías granadinas.

Cuando el día 5 de septiembre el camionero llegó a la provincia de Granada, llamó a su contacto y acordaron que dejara el camión en una área de servicio de Deifontes abierto y con las llaves puestas.

El camionero llegó a dicha área de servicio y dejó el camión estacionado como le habían dicho: abierto y con las llaves puestas. Se marchó del lugar y varias horas más tarde le llamaron por teléfono para que recogiera el camión ya sin carga en una zona próxima al Puente de los Vados, muy cerca de la localidad de Granada.

El camionero recogió el camión y prosiguió su ruta hacia Barcelona. A la vez uno de los detenidos lo siguió en su coche, según lo acordado, hasta una área de servicio de Sagunto (Valencia). Allí lo ató de manos y pies dentro de la cabina del camión hasta que a la mañana siguiente pudiera denunciar el robo una vez que fuera auxiliado.

El día 6 de septiembre por la mañana el camionero denunció ante la Guardia Civil el robo y el equipo de Policía Judicial de Puzol (Valencia) descubrió rápidamente que lo denunciado era falso, por lo que lo detuvieron por un presunto delito de simulación de delito.

Ese mismo día 6 de septiembre, el detenido, que había sido puesto en libertad con cargos, se presentó nuevamente ante el equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Puzol para informar a los agentes sobre un empresario con el que se había puesto en contacto en Granada para venderle el cargamento de cobre a cambio de 30.000 euros.

A partir de este momento la Guardia Civil de Granada se encarga de investigar la sustracción del cobre.

El equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Maracena es el que averigua hay personas que están ofreciendo una importante cantidad de cobre en las chatarrerías de la provincia, y localizan e identifican más tarde a otras dos personas relacionadas con aquel empresario al que el camionero había denunciado.

Al investigar a estas dos últimas personas, los agentes del equipo de Policía Judicial de Maracena descubren que una de ellas posee un almacén en el paraje conocido como Camino de Purchil, en el término municipal de Granada, y que en una nave anexa, que en otro tiempo esta persona tuvo alquilada y de la que aún poseía llaves, estaban ocultas las veintiséis toneladas de cobre.

La Guardia Civil recuperó las planchas de cobre durante la tarde del pasado día 17 de septiembre, y se las devolvió a la empresa sevillana propietaria.

Finalmente, tras el descubrimiento del cobre, la Guardia Civil ha detenido a la primera persona con la que el camionero se puso en contacto en Granada, un empresario de Las Gabias de 42 años de edad, y a los otros dos implicados: un vecino de Huétor Vega, de 26 años de edad, que hizo de intermediario y al que ofrecieron 2.000 si se vendía el cobre; y por último el empresario que ocultó el cobre, un vecino de Granada, también de 42 años de edad.

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